Como agente inmobiliario es básico saber escuchar al cliente para comprender los que necesita, cuál es su espectativa.
Independientemente si se tratara de un cliente corporativo o cliente final, una buena atención debe ser nuestra política desde el primer momento de contacto con el cliente, independientemente si es por diversos canales digitales, ya sea página web, por teléfono, visitas en campo, e-mail, etc.
Al usar empatía poniendonos en lugar del cliente, evitaremos que éste, se quede con dudas o preguntas sin una respuesta clara, convincente.
Tener un ojo clinico como agente inmobiliario va más alla, es importante ser observadores, anticiparnos, ser vistos como un asesor de soluciones y por sobre todo que se evidencie nuestra voluntad de servicio.