El ahorro como pieza clave

Si bien ahorrar suele ser un consejo que ha pasado de generación en generación, también es la recomendación número uno de los especialistas. “Si no tienes ahorros no puedes comprar, ni siquiera financiar, porque para un crédito hipotecario, la entidad te pide una inicial. Por lo menos debes tener ahorrado el 10% de lo que vale el inmueble”, explica Carillo Acosta, a la vez que enumera dos pasos más para que un joven pueda considerar ser propietario de un domicilio: tener un sustento de ingresos permanentes y contar con un buen historial crediticio.

“El ahorro forma parte primordial de cualquier salud financiera. (…) El hábito se debe cuidarse desde la etapa temprana. Si una persona llega a ahorrar por los menos un 10%, entonces el 90% sería apalancado por cualquier entidad bancaria”, advierte Sandoval Peralta. “Previo a eso, ese joven debe tener una salud financiera adecuada, tiene que mostrar un récord crediticio saludable. ¿Por qué? Porque las entidades bancarias van a revisar qué tan buen pagador es y qué tan buen consumidor”, agrega.

Mejor momento del año

Carrillo Acosta explica que el mejor momento para adquirir una propiedad es el cierre del año. “Hay ciertos ingresos que permiten llegar a una cuota inicial: la gratificación, la CTS… y, para las personas del sector informal, está la campaña navideña. Además, es un tiempo en el que hay variadas ofertas inmobiliarias”, concluye.

Extraído de: La República

Sobre el autor